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Un día como cualquiera, un padre de una familia
adinerada llevó a su hijo a un viaje por el campo con el firme propósito que su
hijo viera cuan pobre era la gente que vive en el campo.
Estuvieron pasando todo el día y la noche en una granja de una familia
campesina muy humilde.
Al concluir el viaje, ya de regreso a casa, el
padre le pregunta a su hijo:
¿Qué te pareció el viaje hijo?
Muy bonito papa le contesta
El padre le pregunta de nuevo ¿Viste lo pobre que puede ser la gente?
El hijo responde: Si padre.
¿Y qué aprendiste, ?le pregunta.
El hijo mira a su padre y comienza a decirle: Vi que nosotros tenemos un perro en casa,
ellos tienen cinco.
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Arribes del Duero. (Zamora). |
Mi querida azul:
ResponderEliminarQue tierna y conmovedora la imagen del pequeño potrillito.
La historia es una gran reflexión, nada puede ser más importante y valioso, que aquello que se comparte con cariño, las cosas simples, espótaneas y naturales.
Siempre es un agrado leerte, sobretodo después de una larga semana.
Gracias por este increíble "paseo".
Un abrazo gigante!!.
Hermoso la verdad.
ResponderEliminarA veces el dinero no da la verdadera felicidad
Besines
Hermoso relato Azul, como con pequeños ejemplos se pueden tener distintas visiones del asunto, uno se ve con el ojo capitalísta y el otro se ve con el ojo del corazón.
ResponderEliminarTe dejo un beso
Hola Rayen!Las gracias siempre a ti por tu incondicional amistad, eres estupenda. Es una importante y hermosa reflexión.
ResponderEliminarMiles de besos para ti.
Hola Anna! Dices una grandisima verdad.
ResponderEliminarA veces por mucho dinero que tengas no se consigue ser feliz, mas bien encubren la felicidad con cosas superficiales, materiales.. engañándose falsamente a si mismos.
Muchas gracias.
Besitos
Muchas gracias Osvaldo por tu reflexión y por tu visita también.
ResponderEliminarUn abrazo
Bonito relato, al final la lección se la lleva el padre.
ResponderEliminarMe encanta la frase final dando las gracias por enseñarle que hay otras formas de vivir y de ser mas felices.
El niño con la sabiduría que tienen entendió la riqueza de lo sencillo, que la felicidad no se basa en lo material.
Lo importante de verdad no se suma con una calculadora.... se suma con el corazón.
Muy bonito relato y mensaje Azul. Un beso.
Entre contrastes y la historia
ResponderEliminarque parece va de menos a mas
y todo lo contrario....
es una metàfora y enseñanza...
donde la riqueza està en el alma
en la conciencia y sabidurìa...
de la pureza y la inocencia...
que bello escribes y cuanta imaginaciòn hay en tu mente...
abrazos y besos desde mi valle
Carlos
Mucha gracias Oscar, me alegro mucho que te gustase. Es muy hermosa y enriquecedora.
ResponderEliminarEstuve revisando el blog y he descubierto que en algunas entradas , no te he respondido. No se porque razón, y desde luego es involuntario, por ello te pido disculpas. y te agradezco tu incondicional seguimiento, eres muy amable.
Un beso Azul para ti!
Si Carlos, la riqueza esta en el alma como dices. el padre aprendió del comentario del hijo.
ResponderEliminarUn placer tu visita, muchas gracias.
Un abrazo y un beso.
Hola Azul,
ResponderEliminarEres muy amable, aunque las disculpas no son necesarias. Nunca me he sentido molesto, y realmente no he visto donde me dejaste sin respuesta, pero soy un despistado total sin remedio ya... :)
Al contrario, siempre respondes de un modo amable, agradable y aportando nuevos matices al tema.
Es un placer visitarte y recibir tus visitas, y aun en el caso de que en ocasiones no me contestes.. seguiré por aquí haciendote compañía y comentando tus entradas, así que... :P :)
Un afectuoso beso para ti Azul.
Cuando el espejo de la vida, nos refleja realidades, es la escuela más perfecta para poder aprender tanto....
ResponderEliminarUn abraciño.
Rosa María Milleiro
sorgina1974@hotmail.com;
Hay riqueza más allá del dinero y de las posesiones y lujos. Lo creo desde hace mucho tiempo.
ResponderEliminarEs precioso el cuentecito. Gracias por compartirlo.
Un beso muy grande.
Rosa Maria muchas gracias por tu visita.
ResponderEliminarLa vida es sabia, es la mejor escuela!
Un abrazo para ti.
Gracias a ti por tu visita.Siempre es un placer.
ResponderEliminarBesos Towanda.
Hola, que hermosa reflexión de un niño que se cree solamente lo que ve, no como el padre que ya piensa que se lo está dando todo. Preciosa entrada. Un beso.
ResponderEliminarAl final es el hijo, el que hace reflesionar al padre.
EliminarMuchas gracias por tu visita.
Un abrazo.
Gran lección que nos dan los propios hijos aveces, ellos ven todo más allá de lo material.
ResponderEliminarLindo relato, amiguita Azul.
Gracias por compartirlo!!!
Es una historia preciosa!!.Un niño mira con los ojos del alma, entrega ternura y es feliz con tan poco.
ResponderEliminarNo tenemos que perder nuestra alma de niños, amiga querida.
Abrazos de colores.
Diana, siempre aprenderemos de los hijos, y eso es hermoso y enriquecedor. Gracias a ti.
ResponderEliminarUn beso.
Hola Arcoiris,preciosos colores luces, me encanta.
ResponderEliminarque hermosa reflexión haces. Si,debemos conservar siempre ese niño que llevamos dentro y mirar con sus ojos.
Gracias . Besitos!!!